En
torno al informe sobre las pruebas a maestros y la selección de interinos en
Madrid
2. “De forma pionera” y olé
Para empezar transcribiré el encabezamiento de la nota de
prensa a través de la cual se difundió esta semana el informe sobre el cambio
en las normas para la contratación de interinos y las pruebas de las
oposiciones de maestros de 2011:
“El Consejo de Gobierno conoció
hoy el informe sobre el decreto que cambiará, de forma pionera, los criterios
de baremación de las listas de interinos” (sic)
Y oooolé. ¿Alguien sabe lo que es la “forma pionera”?
En el resto del documento se
esgrimen los resultados de las pruebas de la oposición y se argumenta con ellos
el cambio de la normativa sobre interinos ya comentado.
Para rematar, transcribo el texto
final que merece algunos comentarios específicos, puesto que no tiene
desperdicio:
“Pionera en educación
El nuevo decreto, que modificará
el criterio de la baremación de los maestros y profesores interinos, supone una
nueva medida educativa pionera de la Comunidad de Madrid. En los últimos años
el Ejecutivo regional ha introducido en su sistema educativo la ley de
Autoridad del profesor, el programa bilingüe en inglés, el Bachillerato y las
aulas de excelencia, las pruebas de avaluación externa, la FP dual, la libre
elección de centro educativa- Área Única o la autonomía curricular de los
centros.”
Una vez que me he frotado los ojos para comprobar que era
real lo que veía y, tras salir solo en parte de mi asombro, recapitulo:
La chulería
heredada de la lideresa Aguirrre no solo afecta al presidente González o al consejero
Fernández-Lasquetty y Blanc. También la consejera Figar presume con una
desfachatez inconmensurable de logros que más vale que no lleguen a ser tales
por el bien de la humanidad madrileña y española.
Las medidas educativas “pioneras” ¡Qué miedo!
- Ley de autoridad del profesor. Como es bien sabido no ha servido para nada, en el mejor de los casos.
- El bilingüííííísimo, buque insignia de la lideresa Aguirre logrará que algunos escogidos alumnos madrileños alcancen, también en el mejor de los casos, dos lenguas de uso y ninguna de cultura.
Ya se ha despertado del
deslumbramiento inicial y están llegando a conocimiento general los problemas en
los centros. Últimamente, la Inspección intenta convencer a directores de
Institutos para que se acojan a un programa que está perdiendo hasta su valor
propagandístico (el único que realmente interesaba al ejecutivo madrileño).
- El bachillerato y las aulas de élite no merecen especial mención, ya que afectan a muy pocos estudiantes para los que sería bueno desear que no pierdan su contacto con la realidad del resto de los seres humanos. Y que no se enfaden, que aunque su nota sea baja en comparación con los “normales” y en relación con la selectividad, ya se lo arreglarán para que no denuncien el engaño.
- Las pruebas de evaluación externa han supuesto la elaboración y la publicación de rankings de centros que, independientemente de la calificación moral de tales comparativas indecentes, no generan más que angustia en el profesorado que tiene que atender a la población más desfavorecida y que ve como el centro de su barrio va convirtiéndose en un gueto propio de la enseñanza subsidiaria de la supuestamente más afamada de los centros concertados. Es pionero, según la Consejería de Educación, restar posibilidades y recursos a quien más los necesita. Así entienden la “igualdad de oportunidades”: pelear y competir con quien tiene todas las de ganar.
- La FP dual no deja de ser una forma barata de formar profesionales y desentenderse de ellos para que las empresas les exploten convenientemente. Mientras se cierran centros, incluso concertados.
- La llamada libertad de elección no deja de ser una falacia ya tradicional en el conservadurismo político español. ¿Me pagarán el viaje y la manutención si elijo un centro de la “milla de oro” educativa aunque esté a muchos kilómetros de mi casa?
- La autonomía curricular no deja de ser la forma de autorizar de facto que las opciones más idelogizadas, naturalmente de titularidad privada, campen por sus respetos.
Lucía “La pionera”, la voz engolada de la educación
madrileña, sigue al pie de la letra las orientaciones propias del liberalismo
neocon y cañí de la España más reaccionaria. Échense a temblar el resto de las
comunidades autónomas, si estas son las medidas pioneras. Serán imitadas por
sus compinches políticos.